El masaje prenatal, realizado correctamente, es una forma segura y eficaz de reducir el estrés y aliviar las molestias del embarazo. Un buen masaje es como lograr la combinación perfecta de autocuidado: puede minimizar el estrés, eliminar dolores y molestias, y brindarte una experiencia de máximo lujo. Y durante el embarazo, los beneficios del masaje prenatal se intensifican aún más. La masajista certificada DeBorah Hillside, enfermera titulada y terapeuta de masaje licenciada, describe qué esperar de un masaje prenatal, qué evitar y qué beneficios te puede aportar.
¿Qué es el masaje prenatal?
El masaje prenatal es una técnica de autocuidado y terapia complementaria que puede ayudar a aliviar los dolores físicos y psicológicos del embarazo.
La terapia de masaje prenatal te permite disfrutar de todos los beneficios del masaje de una manera segura durante el embarazo.Leer acerca de masajes para embarazadas En el sitio web Esto puede incluir técnicas como:
- Masaje sueco
- Liberación miofascial
- Terapia craneosacral
"El masaje prenatal se basa en técnicas muy suaves que son efectivas para aliviar el dolor", afirma Hill.
Qué esperar durante un masaje prenatal
En muchos sentidos, un masaje prenatal es similar a un masaje terapéutico tradicional, pero con algunas adaptaciones para el embarazo. "Un masaje prenatal generalmente utiliza una presión muy ligera, de firme a media", explica Hill. En otras palabras, no esperes el tipo de masaje de tejido profundo que se usa para liberar contracturas musculares difíciles. «La terapia de masaje prenatal no debería causar ninguna molestia. No buscamos presionar profundamente», añade. Además, a diferencia de un masaje tradicional, los masajes prenatales se realizan normalmente de lado. Algunos accesorios específicos para el embarazo pueden ayudar a mantener la comodidad y asegurar que el cuerpo esté correctamente alineado. Esto incluye cojines y almohadas firmes (o almohadones) para mayor comodidad. Los masajes prenatales suelen durar entre 15 minutos y una hora. Al igual que con otros masajes, puedes estar tan cubierta (o tan desnuda) como desees. «Durante un masaje prenatal, te cubren con sábanas y una manta», explica Hillside. «Algunas personas se desvisten por completo. Otras prefieren usar sábanas y mantas de embarazo porque permiten mayor libertad de movimiento. Algunas prefieren quedarse en ropa interior». Lo que te convenga debería estar bien para tu empresa.
¿Cuándo deberías recibir un masaje prenatal?
Hill afirma que la mayoría de los proveedores de servicios de maternidad suelen aconsejar esperar hasta el inicio del segundo trimestre (a partir de la semana 12 de embarazo) para recibir un masaje prenatal. «Es recomendable esperar hasta que termine el primer trimestre», dice Hill. «Se considera que lo mejor es limitar o evitar los masajes durante el inicio del embarazo, cuando el riesgo de aborto espontáneo es mayor». Una vez que el embarazo avanza al segundo trimestre, cuantos más masajes, mejor. Hill aconseja recibir un masaje cada dos semanas para obtener el máximo beneficio. Al llegar al final del tercer trimestre y aumentar los dolores, puedes recibir un masaje aproximadamente una vez por semana.
Ventajas del masaje prenatal
La terapia de masaje prenatal puede ser relajante y, además, puede brindar diversos beneficios para la salud.
Una evaluación de un estudio recomienda que puede ayudar a:
- Reducir el estrés y la ansiedad
- Aliviar el dolor de espalda y piernas
- Reducir la depresión, el estrés y la ansiedad
- Mejorar la respuesta inmunitaria
- Aumentar los niveles de endorfinas (como la serotonina y la dopamina, que pueden ayudar a mejorar el estado de ánimo)
- Mejorar los resultados del parto, incluyendo un mayor peso al nacer y un menor riesgo de parto prematuro
Según Hillside, "tanto si estás embarazada como si no, recibir un masaje puede reducir las hormonas del estrés y estimular la producción de oxitocina". «Se sabe que la oxitocina ayuda a intensificar las contracciones y a fortalecer el vínculo con tu bebé».
¿Existen riesgos?
Los riesgos de la terapia de masaje prenatal realizada por un masajista certificado son mínimos en la mayoría de los embarazos saludables, especialmente después del primer trimestre.
Para garantizar tu seguridad y promover un embarazo saludable, tu terapeuta debe cumplir con estas normas de seguridad:
- Presión suave: El embarazo no es momento para un masaje con presión intensa. «Si estás embarazada y tienes coágulos de sangre, la presión profunda podría desprenderlos», advierte Hill. La presión profunda también puede afectar negativamente tu presión arterial durante el embarazo.
- Posición de lado: Acostarse boca abajo o boca arriba aumenta el riesgo de hipotensión y puede causar estrés. Y aunque algunos especialistas en terapia de masaje cuentan con camillas especiales para masajes prenatales con un orificio para que puedas recostarte boca abajo, lo más recomendable es recibir un masaje prenatal de lado.
- Problemas durante el embarazo: Siempre consulta con tu médico antes de recibir un masaje prenatal. Es posible que no lo recomienden si tienes problemas de salud relacionados con el embarazo, como diabetes gestacional, hipertensión arterial u otras afecciones.
Si tu médico te desaconseja un masaje prenatal, busca un terapeuta de masaje acreditado y capacitado para brindar este tipo de terapia. Prepárate para disfrutar de un tiempo para ti.
"Durante el embarazo, muchas cosas se vuelven menos importantes, desde la comida y la bebida hasta las actividades que disfrutas e incluso ciertos medicamentos", reconoce Hill. "Los masajes prenatales son una excelente opción para sentirte mejor".
